LA EVOLUCIÓN DEL DEPORTE

Está claro que el deporte ha ido evolucionando a lo largo de los años, hacia mejor o hacia peor, eso no lo sabemos. Lo que sí sabemos es que hace unos 30 años el deporte era únicamente visto como eso, deporte en estado puro y sin más artificios. No existía internet, la radio, tv y la prensa escrita eran los únicos medios para informarse de acontecimientos Mundiales relacionados con el deporte.

Recordamos los Juegos Olímpicos de Seúl en 1988 o por ejemplo el Mundial de Italia en 1990, los recordamos sí, de haberlos visto por la tele, pero sin prestarle más atención de lo necesario.  No había impacto, no había color (me refiero a alegría), no había grandes campañas publicitarias. Personalmente los recuerdo como sosos, aburridos y de color sepia.

Pero, a partir de los Juegos de Barcelona 92 y el Mundial USA en el 94, la cosa cambia. ¿Qué pasó? Por un lado Barcelona impulsa su candidatura con la ilusión de darse a conocer al mundo, con el objetivo de convertir Barcelona en un referente mundial, transformar una ciudad gris y aburrida en una ciudad alegres y colorida. Eso se consiguió fusionando los valores del deporte con los valores de Catalunya y España. Algo empieza a cambiar...

Y en USA 94? Los USA querían promocionar el deporte en su propio país y que mejor modo de hacerlo que  celebrar el Mundial en sus tierras, quizá el objetivo final no se alcanzó (al menos en cuanto al fútbol masculino, por qué el femenino recibió un gran impulso gracias al Mundial y podemos decir que la selección femenina de soccer es una de las mejores del mundo, no así en el caso masculino). Pero la organización fue ejemplar, de hecho fue un máster en planificación y organización de eventos deportivos, así como una máster class en la utilización del Marketing. Si actualmente en  los USA la gestión deportiva profesionalizada aún nos gana por bastantes puntos de diferencia, en esa época mejor ni imaginárselo...

Estamos en 2012, internet y las redes sociales han desarrollado un impacto inimaginable hace 30 años.  Nos enteramos de cualquier resultado deportivo al segundo, en cualquier parte del  mundo. Y estas herramientas han contribuido de manera esencial en la profesionalización de la gestión del deporte. Los antaño conocidos como Mundiales o JJOO se han convertido en mega eventos deportivos con audiencias mundiales y millonarias que aportan billonarios ingresos y en los que se asumen astronómicos gastos.

Los antiguos clubes de fútbol, básquet, etc... se están convirtiendo en mastodónticas corporaciones que unen su poder a multinacionales para tener aún más poder. En este punto las guerras de marcas comerciales para salir en primera plana y convertirse en las ganadoras de cualquier evento deportivo son espeluznantes .

Ahora en las finales de cualquier evento deportivo se debate en ver si Nike gana a Adidas o viceversa, si Heineken tiene más presencia que Coca-Cola o si una empresa trata de colarse en cualquier de estos eventos sin tener que pagar en concepto de derechos de imagen. Antes existían Sócrates, Maradona, Cruyff, Romario, Baresi...ahora CR7, M10, LA ROJA, el PEP TEAM, LOS GALÁCTICOS...conceptos más globales y creados para vender más.

Y eso supone una gran profesionalización, un hecho que la crisis económica que nos afecta va a potenciar aún más ya que todos aquellos equipos que dependían de patrocinios, ayudas, subvenciones y no disponían ni disponen de una buena gestión van a desaparecer. A no ser que decidan profesionalizar su gestión, saldar sus deudas, sanear las cuentas, bajar salarios, buscar el equilibrio financiero y gestionar sabiamente sus activos así como potenciar su imagen localmente buscando apoyos/colaboraciones y globalmente buscando y captando nuevos recursos y aficionados.

Pero siempre nos quedará la pasión y la emoción del deporte, estos son los elementos constantes que nunca varían. Por qué para realizar campañas de marketing online y en redes sociales de éxito es necesario ese componente para vincular a socios, aficionados, patrocinadores, colaboradores...sí, hay que profesionalizarse y mucho, pero no hay que olvidar el ejemplo de Barcelona 92 o del Barça de Guardiola, del Levante, del Rayo Vallecano, del Betis,...sus valores y lo que transmiten y hacen sentir al aficionado, les permite vincularse y hacerles sentir parte de ese grupo y del éxito.

Sin ese vínculo único y sagrado, cualquier deporte, club o deportista volverá  a ser gris, aburrido y sepia.  Y tiene el riesgo de desaparecer del nuevo mapa del deporte mundial que se está estableciendo.

Por favor, estaré encantado de leer vuestros comentarios.

Un saludo,

Gerard Valldepèrez Folch

Economista, auditor y especialista del deporte.

Socio Director de Trust Sport Management.